Tercera edad y calidad de vida
La tercera edad es una etapa que está rodeada de muchas concepciones falsas, de temores, creencias y mitos. Hacerse mayor significa adaptarse a cambios en la estructura y funcionamiento del cuerpo humano por un lado y cambios en el ambiente social por el otro. Para lograrlo exitosamente se debe mantener una participación activa en roles sociales y comunitarios para una satisfacción de vida adecuada.
La organización de la personalidad y el manejo de situaciones, son factores prioritarios. Esto tiene que ver con la manera en que el individuo se desenvuelve en las diversas situaciones de su vida. Por consecuencia el sujeto debe adaptarse continuamente a las condiciones de vida.
Áreas de importancia en la calidad de vida
La calidad de vida en los mayores comprende:
• Bienestar físico: refiriéndose a la comodidad en términos materiales, de higiene, salud y seguridad.
• Relaciones interpersonales: en cuanto a las relaciones familiares, y con otras personas.
• Desarrollo personal: relacionado con las oportunidades de desarrollo intelectual, autoexpresión, actividad lucrativa y autoconciencia.
• Actividades lúdicas: para socializar y buscar una recreación pasiva y activa.
Importancia de las actividades lúdicas
La recreación es una alternativa de adaptación a los cambios y pérdidas sociales del mayor. La palabra recreación nos da la idea de crear nuevamente, motivar y establecerse nuevas metas, nuevos intereses y estilos de vida. Se trata de mejorar la calidad de vida mediante un envolvimiento en actividades estimulantes y creativas. Este tipo de actividades deben fomentar la memoria, la atención, el lenguaje, la motricidad y la autoestimas.
Actividades lúdicas y mayores
Ejemplo de actividades lúdicas para mayores serían: confección de pulseras y collares con el uso de abalorios para fomentar la concentración, la atención, la motricidad fina y la creatividad. Colorear mándalas para potenciar la agilidad manual y mantener la atención y la concentración, además fomenta la autoestima y autosatisfacción. Realizar puzles favorece la concentración. Leer y comentar textos fomenta la memoria y la comunicación verbal además de mantener la atención y la concentración. Realizar pasatiempos, crucigramas, sopas de letra o sudokus ayudan a mantener y mejorar el léxico, la memoria y la concentración además de favorecer el pensamiento lógico y la agudeza visual.
J. Miguel San Martín. Psicólogo sanitario.